Actualmente estoy en un proyecto con varios amigos y conocidos. Para nadie es un secreto que trabajar en equipo puede ser un dolor de cabeza.

Muchas veces, algunos ven el vaso medio lleno, mientras que otros lo ven medio vacío, y allí empieza la migraña.

En esos momentos se producen estancamientos, roces entre el equipo u otras situaciones que lo que nos produce es desgaste mental.

Hace poco en el equipo de trabajo, un amigo decidió no seguir adelante, una decisión que ya venía pensando por el desgaste que este proyecto le venía produciendo.

Muchos podrán opinar que no aguantó, o que debía esperar, o cualquier opinión contraria a salir. Para mí fue una decisión inteligente.

En diversas situaciones o escenarios de nuestra vida, donde no siempre estamos acompañados, lo que nos toca es ser inteligentes. No se trata de ser egocéntrico o intransigente, que “si las cosas no son como yo quiero, entonces no continúo”. 

No, se trata de que seamos inteligentes, ver el panorama y, como ingenieros, arquitectos, obreros, constructores de nuestra vida, nos toca ser pragmáticos y recordar que es mejor decir aquí corrió, que aquí murió. 

Y como dijo Eckhart Tolle «A veces dejar pasar las cosas es un acto de poder mucho mayor que obstinarse en mantenerlas”

Mariano Olivares 

2024, 22 de febrero

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